El último icono del star system. La mujer que cautivó a decenas de hombres y se casó con siete de ellos. La Cleopatra eterna. La beldad glamorosa y filántropa.
Todos estos apelativos sirven para describir a Elizabeth Rosemond Taylor, quien falleció ayer luego de más de dos meses de estar internada en el hospital Cedars-Sinaí Medical Center por un mal cardiaco que padecía desde hacía años.
Al momento de su muerte, según relató su agente de prensa, la última diva de Hollywood estaba acompañada por sus hijos Michael Wilding, Christopher Wilding, Liza Todd y María Burton. “Mi madre era una extraordinaria mujer que vivió la vida al máximo, con una gran pasión, humor y amor”, dijo Michael.
TRES ESTATUILLAS DORADAS. Su carrera como actriz tuvo los puntos más altos cuando ganó el premio de la Academia de Artes Cinematográficas de Hollywood por ¿Quién le teme a Virginia Woolf? (1966) y Una mujer marcada (Butterfield 8, 1960). En 1993 recibió una tercera estatuilla, honorífica, por sus labores humanitarias.
La extensa lista de cintas que protagonizó —50, según los expertos— incluye títulos emblemáticos, como El padre de la novia (1950), Gigante (1956), El árbol de la vida (1957), La gata sobre el tejado de zinc caliente (1958), De repente, en el verano (1959), Cleopatra (1960), Reflejos en un ojo dorado (1967) y El espejo roto (1980).
TALENTO HEREDADO. Elizabeth Rosemond Taylor nació el 27 de febrero de 1932 en Hampstead (Londres), donde vivió hasta sus siete años, cuando sus padres, de origen estadounidense, decidieron instalarse en California (EEUU) ante el inminente inicio de la II Guerra Mundial.
Su vocación artística le llegó por parte materna. Su madre había sido actriz teatral, mientras que de su padre heredó su amor por el arte.
Taylor atesoró durante su vida una gran colección de suntuosas joyas, entre las que destacan un diamante de 33,19 quilates que perteneció a la mujer de un colaborador de los nazis y otro que fue propiedad de la esposa favorita del emperador indio Shah-Jahan, en cuya memoria mandó erigir el célebre Taj Mahal.
Temperamental, carismática y rebelde, esta actriz que debutó en plena edad dorada de Hollywood, se casó en ocho ocasiones, dos de ellas con el actor Richard Burton, su gran amor junto con su tercer marido, el productor Michael Todd, según admitió ella misma.
Además de sufrir de diversas neumonías durante su vida, Taylor había superado en los últimos años problemas de espalda, operaciones de cadera e, incluso, un tumor en el cerebro. EFE.
Hay consternación general por su partida
La noticia de la muerte de Elizabeth Taylor causó un gran impacto en la meca del cine, Hollywood, y las reacciones de las celebridades no se hicieron esperar.
“Elizabeth, a todos los niveles, fue una persona íntegra. Bondadosa, generosa, valiente”, dijo Jane Fonda. Ella y Taylor compartieron escenas en El pájaro azul (1976).
Michael Caine, vía Twitter, escribió: “Muy triste escuchar acerca de mi preciosa amiga Elizabeth Taylor. Era un genial ser humano”. Coincidieron en el filme Zee and Co. (1972).
La popular presentadora de televisión Barbara Walters dijo que había estado en contacto con Taylor los días previos a su muerte. “Estábamos en contacto. Pensé que saldría adelante”, dijo Walters en el programa Good Morning America del canal ABC. Además, explicó que su amiga le había comentado que de todas las películas que rodó a lo largo de su carrera, le gustaría que el público la recordara por ¿Quién le teme a Virginia Woolf?, cinta por la que ganó el segundo de sus Oscar.
Crónica de una vida única
Elizabeth Taylor nació en 1932. Debutó en el cine en 1939 en la película Hombre o ratón. En la década de los 50 protagonizó, entre otros filmes: Un lugar en el sol (51), Ivanhoe (52), La senda de los elefantes (54), Gigante (56), El árbol de la vida (57), La gata sobre el tejado de zinc caliente (58) y De repente, en el verano (59), según informa El Mundo, de España.
En los 60 intervino en Una mujer marcada (60, Oscar a la mejor actriz), Cleopatra (63), ¿Quién teme a Virginia Woolf? (66, Oscar a la mejor actriz), La fierecilla domada y Reflejos en un ojo dorado (ambas en 1969).
En la década de los 80 debutó en Broadway con The little foxes (81), y junto a Richard Burton presentó Vidas privadas (83).
En 1991 creó la Fundación contra el Sida Elizabeth Taylor. Para 1999 había logrado recaudar cerca de 50 millones de dólares que sirvieron en la lucha contra esa afección.
En 2006 donó una clínica móvil a una organización antisida en Nueva Orleans, valorada en varios millones de dólares.
Lucha tenaz contra el VIH
La muerte de su amigo Rock Hudson, en octubre de 1985, llevó a Liz Taylor a impulsar primero la creación de la Fundación Estadounidense para Investigaciones de Sida, y luego, en 1991, a instaurar la Fundación contra el Sida Elizabeth Taylor.
En la década de los 90 viajó con frecuencia al Asia para trabajar con pacientes seropositivos.
Al momento de su deceso, sus hijos pidieron que en vez de flores, hicieran donativos a su Fundación ejemplar.
Una mirada cautivante
EFE. Dicen que las estrellas del cine mudo se rebelaron contra las películas sonoras porque no necesitaban más que su rostro para contar todo al espectador. Aunque Elizabeth Taylor triunfó varias décadas después de que lo hicieran Mary Pickford o Gloria Swanson, su cara y sobre todo sus míticos ojos color violeta decían mucho más que cientos de líneas de diálogo.
El deseo de su madre de ver su quimera cumplida —ella abandonó los escenarios al casarse— y el consejo de un vecino que apreció la belleza extraordinaria de la pequeña Elizabeth hicieron el resto. La niña fue a una prueba y filmó su primera película con sólo siete años.
En los últimos años, en sus escasas apariciones públicas, iba en silla de ruedas, pero mantenía la presencia de la diva que era.
Amiga leal hasta el fin
CON DATOS DE INTERNET. Elizabeth Taylor fue quien le dio el apelativo de Rey del Pop a su entrañable amigo Michael Jackson durante una entrega de premios en la década de los 90.
En retribución, Jackson escribió una canción exclusiva para su cumpleaños, llamada Elizabeth I love you, y una fotografía que los mostraba juntos fue incluida en la carpeta del álbum de éxitos de Jackson, History, comercializado en 1995.
Lo apoyó en tribunales ante las declaraciones de abuso infantil en su contra. A la muerte del cantante, se negó a participar en su sepelio televisado, pero estuvo en primera fila en el acto privado.
Nicky Hilton
En mayo de 1950 se casó por primera vez con Conrad Nicholson Hilton Jr., uno de los hijos del fundador del imperio hotelero.
Michael Wilding
En febrero de 1952, el novio fue el actor británico Michael Wilding, con quien tuvo dos hijos: Michael y Christopher. Duraron cuatro años.
Mike Todd
Febrero 1957. Con el productor Mike Todd, con quien tuvo a Liza Todd. El empresario murió en un accidente de aviación en 1958.
Eddie Fisher
Mayo 1959. El cantante Eddie Fisher, mejor amigo de Todd, se convirtió en el cuarto marido de la diva, para sorpresa y estupor de sus seguidores.
Richard Burton
Marzo 1964. El actor británico fue el único con quien reincidió. Hasta la iglesia se opuso a su unión, que duró cerca de una década.
Richard Burton
Octubre 1975. Luego de un tiempo de idas y venidas, y una sonada reconquista que incluyó un gran diamante. Adoptaron a María Burton.
John Warner
Diciembre 1976. Se refugió en los brazos del senador republicano John Warner, representante de Virginia. Su unión llegó a los seis años.
Larry Fortensky
Octubre 1991. Tras conocerlo en el rancho Neverland de Michael Jackson, se casó con este obrero de la construcción. Un lustro vivió con él.
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