Disney, propietaria en la actualidad de Lucasfilm y de la franquicia de «La Guerra de las Galaxias», contrató una póliza seguro de 47,7 millones de euros para Carrie Fisher, según el sitio web «Insurance Insider», tal y como informa «Telegraph». La compañía decidió contratar la póliza para asegurarse la participación de la actriz en las próximas tres películas de la saga.
Tras la muerte de la actriz el pasado 27 de diciembre, Disney cobrará el pago más cuantioso de la historia por un accidente de este tipo.
Fisher había terminado de rodar sus escenas como la general Organa en la próxima cinta de la saga, el Episodio VIII, cuyo estreno está previsto para diciembre del año que viene, pero no en la siguiente película, aunque ya se ha especulado acerca de la posibilidad de la continuidad de su personaje a través del CGI, un método recurrido en «Rogue One: una historia de Star Wars».
Curiosamente, esta cinta termina con una imagen de la princesa Leia en CGI. Por su parte, Peter Cushing, fallecido en 1994, resucitó gracias a esta tecnología en la misma película.
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