Tom Hanks confirmó al mundo en el programa de David Letterman lo que viene sospechando desde hace más de dos décadas: que padece diabetes. Por suerte para el actor de 57 años, es del tipo 2 (la llamada 'diabetes del adulto'), una enfermedad metabólica caracterizada por los altos niveles de glucosa en la sangre que generalmente no requiere de inyección de insulina.
El protagonista de 'Captain Phillips', que lleva semanas promocionando su nueva película sobre el asalto de piratas somalíes a un carguero estadounidense, explicó que su médico le comunicó que padece la enfermedad tras un chequeo rutinario. El galeno le hizo entender que los niveles altos de azúcar que ha estado padeciendo desde que tenía 36 años se debían a la diabetes tipo 2 que con la que ahora tendrá que convivir.
Pese a la mala noticia, Hanks ha conseguido mantener su peso a raya, una faceta que suele resultar complicada para las personas que sufren de la patología. No solo sigue estando muy delgado a sus 57 años, sino que ha logrado subir y bajar de peso para responder a la múltiples exigencias del guión a las que se ha enfrentado a lo largo de su carrera.
Para la cinta 'Ellas dan el golpe' tuvo que engordar varios kilos, metido en la piel de una estrella de béisbol retirado y convertido en entrenador de un equipo femenino durante la Segunda Guerra Mundial. Después, en 'Náufrago', se vio obligado a perder muchos de esos kilos a medida que iba avanzando el rodaje.
En la actualidad, el protagonista de 'Esta casa es una ruina' asegura que puede controlar la diabetes con una dieta sana y equilibrada y haciendo ejercicio, aunque deberá empezar a tomar pastillas para compensar la resistencia celular a las acciones de la insulina.
Hanks no es el único en Hollywood con esa clase de diabetes. En la lista hay nombres como Halle Berry, el presentador Drew Carey y la cantante Patti Labelle.
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