La historia nos presenta a Lenore, una joven que queda embarazada de su novio de toda la vida, llamado Frank. La muchacha decide abandonar la universidad, irse a vivir con su pareja y dedicarse al cuidado del bebé. La felicidad comienza a desaparecer cuando, en la sala de parto, el doctor y sus ayudantes son asesinados de una manera extraña. Sólo la madre y el recién nacido quedan con vida, mientras que no hay ningún rastro del criminal.
Los días pasan y las muertes de personas y animales no dejan de sucederse, con casos que siempre están vinculados al bebé. Poco a poco, la verdadera naturaleza del niño comienza a salir a la luz y Lenore deberá elegir entre el amor por su hijo y la vida de su familia.
Es importante destacar que el propio Cohen se ha involucrado en el guión de ¡Está vivo!. El espectador puede esperar, por lo tanto, muchos puntos en común con la propuesta de 1974, algo que parece obvio al tratarse de una remake y que se refuerza con la participación del director original. Sin embargo, Cohen decidió diferenciar ambas propuestas e incluyó muchos elementos novedosos.
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