Quién se iba a imaginar que una película producida y grabada en Bolivia reciba cuatro premios Goya y que compita con películas del destacado director Pedro Almodóvar. Blackthorn se llevó las estatuillas a Mejor Dirección de Producción, Mejor Producción de Fotografía, Mejor Dirección Artística y Mejor Vestuario, esto de la mano de su director Enrique Urbizu y el coproductor en Bolivia, Paolo Agazzi.
Un boliviano feliz. El cruceño César Morón, quien participó en el filme como coordinador de arte, cuenta emocionado su experiencia de trabajar en la cinta. Dice que no se esperaba los premios y que fue una satisfacción impresionante ya que la película competía con grandes producciones.
"Para nosotros es un honor y un orgullo haber ganado tal cantidad de premios, nos sentimos satisfechos", expresó. Todo el equipo de Blackthorn se siente muy feliz, ya que si bien su película no era comercial, la gente especializada en el cine valoró bastante bien el filme. "Es una película española, pero con un 80% de equipo y sangre boliviana", dijo emocionado Morón por los logros conseguidos.
Las anécdotas. La cinta fue filmada a casi 5 mil metros de altitud, César cuenta que el centro de Potosí fue cubierto con arena para realizar unas tomas, lo cual fue una gran experiencia. "Ha sido muy interesante trabajar con caballos entrenados, ellos sufrieron los traslados y también se lo robaron", cuenta César, el dueño de los equinos, quien hasta ahora sufre por la pérdida de sus animales adiestrados desde hace un año.
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