El matrimonio no es la meta de un camino sino más bien una nueva prolongación del mismo. La rutina que se asienta en una pareja al transcurrir los años es, en la mayoría de las ocasiones el principal problema con el que deben lidiar dos personas que han decidido pasar sus vidas juntas. ¿Pero qué sucede cuando la pasión y el deseo empiezan a apagarse? Para una mujer decidida a recuperarlos esto significa tener que arrastrar a su esposo a un retiro muy especial donde cualquier cosa puede ocurrir.
En Qué hago con mi marido, Kay (Meryl Streep) y Arnold (Tommy Lee Jones) son una pareja devota que aún se ama profundamente, sin embargo las décadas de matrimonio han dejado a Kay con ganas de encender las cosas y reconectarse con su esposo. Cuando escucha sobre un reconocido especialista de parejas (Steve Carell) en el pequeño pueblo de Great Hope Springs, ella intenta persuadir al escéptico Arnold para ir a una semana de terapia de parejas. Desde el inicio tan solo convencer a un hombre tan terco prueba ser todo un reto. El verdadero desafío para ambos llega cuando descartan sus complejos de alcoba para intentar volver a encender la chispa que causó que se enamoraran en un inicio.
“Estas preguntas de intimidad y deseo, anhelo, ansia de ser visto y comprendido y amado es central para nuestra cultura”, comenta Meryl Streep al abordar el tema central de la cinta: la desconexión por el que muchas parejas pasan.
“Creo que muchas personas tienen una idea sobre su relación – dónde está, a dónde tiene que ir para ser exitosa”, dice Steve Carell, quien interpreta al Dr. Feld, el psiquiatra cuyo legendario retiro en Maine es la última esperanza de Kay para su matrimonio. “Yo creo que eso es lo que hace a esta película tan divertida, la gente puede ver por lo que están pasando Arnold y Kay e identificarse con ello y reírse de ello”. La cinta esta dirigida por David Frankel.
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