A 20 años de la película Jonás y la Ballena Rosada

En 1993, Juan Carlos Valdivia apareció en la oficina de Carlos Mesa con un guión bajo el brazo, que había decidido enviarlo a un concurso en México. "Le deseé mucha suerte", cuenta Carlos Mesa en su blog sobre el germen de Jonás y la Ballena Rosada, película que se ha convertido en un clásico del cine nacional y que cumple 20 años desde su estreno en 1995.

En aquella ocasión, Jimena, hermana de Juan Carlos y socia de Mesa en Periodistas Asociados de Televisión (PAT), le replicó con un desafío: “No, no es así la cosa, en caso de ganar la película tiene que hacerse. Además del guión tiene que adjuntar un presupuesto detallado del filme y contar con una empresa que esté dispuesta a llevarlo a la pantalla”. Y el guión ganó, entonces PAT, un canal de Tv, se lanzó a un desafío titánico y complicado: hacer cine en coproducción con una firma mexicana.

¿Por qué esa obra?. Mesa relata en su blog que Juan Carlos Valdivia decidió hacer un guión sobre la obra homónima del escritor cruceño Wolfango Montes, debido a que el libro se lo había enviado su hermana Jimena cuando él radicaba en Estados Unidos.

El reparto estuvo integrado por actores como Dino García, María Renee Prudencio, Claudia Lobo, Julieta Egurrola, Guillermo Gil, Elías Serrano, Milton Cortez, Juan Claudio Lechín, Juan Carlos Valdivia, Etelvina Peña, Ejti Stih, Miriam Molina, Paola Chirino. Incluso participó el actual alcalde de Santa Cruz, Percy Fernández.

Para Elías Serrano fue su primera gran experiencia en un filme, puesto que era una industria de enormes equipos, desde las cámaras hasta los generadores de corriente. "Una de las cosas más impresionantes que viví en esa época", señala el actor que personificó a Pablo, hermano de la protagonista. En total eran 16 toneladas de equipos, transportadas en un avión del LAB hacia el actual Museo de Historia, antigua "casona" donde residió Ramón Darío Gutiérrez y que sirvió de set.

Serrano cuenta que ha mirado unas 7 u 8 veces la película y destaca que fue una de las más taquilleras de la época con 160 mil espectadores, cifra impensable hoy para un filme nacional que a lo mucho alcanza los 30 mil espectadores.