Romance, ciencia ficción y mensaje positivo

Es la fórmula de Una cuestión de tiempo (About Time) que se está convirtiendo en una de las películas preferidas en las taquillas.

Su director y guionista es Richard Curtis, que debutó como director en 2003 con Love Actually.

Ganadora del Premio del Público a la mejor Película Europea en el pasado Festival de San Sebastián, narra la historia de un joven más bien torpe (Domhnall Gleeson) que descubre poseer un don que le permite viajar en el tiempo. Con este privilegio, fruto de la herencia genética de su padre (Bill Nighy) y de sus otros antepasados varones, regresará al pasado para intentar conquistar a la mujer de sus sueños, una chica norteamericana (Rachel McAdams).

El artífice de Una cuestión de tiempo es Richard Curtis que ha trabajado en los guiones de algunas de las comedias románticas británicas más populares de los últimos años, como El diario de Bridget Jones, Notting Hill o sobre todo Cuatro bodas y un funeral. El veterano Curtis probó fortuna tras las cámaras en 2003 con Love Actually que se erigió en otro de los títulos de referencia del género, después le seguiría Radio encubierta (2009).

EXPERTO EN ROMANCE

Richard Curtis, de Una cuestión de tiempo, dice: “La regla para escribir una comedia romántica es no escribir una comedia romántica”.

Se equivocaba León Tolstoi cuando decía que todas las familias felices se parecen y Cuestión de tiempo podría servir para probarlo. En todo caso, la felicidad de la familia del joven Tim (Domhnall Gleeson) es tan exclusiva como la capacidad de viajar en el tiempo que él hereda de su padre (Bill Nighy).

La idea de los viajes temporales tiene una larga historia en la ciencia ficción. Y sólo en su variante romántica fue ensayada con distinta suerte en el cine, desde la genial El día de la marmota hasta la fallida Te amaré por siempre(también con Rachel McAdams). Pero la expectativa consistía en saber qué fruto daría esa idea en un director y guionista tan dúctil como Richard Curtis). El resultado puede compararse con una de esas canciones pop que tienen una letra sensible.

Curtis es un cineasta ambicioso, no se conforma con el amor de una pareja, necesita más aire para experimentar su fórmula de la felicidad.