Mujeres y hombres son terrícolas

Hace poco más de una década, John Gray escribió, los hombres son de marte, las mujeres son de venus, un best seller en aquel momento. Según su relato estuvieron felices porque respetaron y aceptaron sus diferencias; el autor usó esta metáfora para explicar los conflictos habituales entre ellos.

“Nada de esto es cierto, mujeres y hombres somos similares, lo único diferente son las prendas que lucimos hacia el interior de cada sexo y eso es secundario”, afirma el psicólogo mexicano Rolando Díaz Loving en una de sus conferencias que dictó en la UPSA de Santa Cruz.

“Lo que sucede es que los roles y normas que se habían separado para la mujer y que venían de siglos de opresión se han ido modificando, ahora el grupo femenino se liberó de esas ataduras y comparte con la pareja los quehaceres. Hoy hablamos de opciones integrales que favorecen el desarrollo común y el bienestar de ambos”, añade Díaz Loving, quien acepta el diálogo con Femenina de El Diario.

¿Esta visión afecta a la forma que tenemos de ver al hombre y la mujer?

Habría que plantear el tema de otra manera y ver qué características le dio la sociedad a uno y otro, porque las diferencias no son más que andrógenas, son sólo hormonas que a uno le dan una voz más gruesa o posibilidad de tener barba, nada más, eso no le da la capacidad de ser más responsable o vivir más años, a lo sumo le hará más agresivo o chillón en algunas circunstancias.

¿Entonces hay que trabajar en la educación del hombre?

No, hay que trabajar con ambos. También las mujeres, que se van insertando cada vez más en las direcciones de grupos sociales. Tiene que ver la incidencia de este factor en su vida, de pronto plantearse por qué desde niñas les inculcaron que debían ser cariñosas y tiernas.

¿Cuánto influye en este caso el desempleo de muchos hombres?

Originalmente eso también ocurría con la mujer, ella estaba desempleada y el otro tenía una fuente de trabajo. Este sexismo siempre hubo y lo hay en el presente, lo que se demuestra que la personalidad y la orientación sexual no tienen que ver con la estructura de trabajo, estos son otros tiempos. Por esta mala orientación a veces llegamos a ciertas generalizaciones que no son reales. Hay que hacer otro tipo de análisis.

¿Pueden intercambiarse los roles?

Bueno usted quiere hacerme decir que el hombre cambie los pañales y la mujer vaya a su fuente de trabajo. Esta nueva sociedad va dejando a muchos jóvenes sin oportunidades y en condición desfavorable. Para que cualquier especie sobreviva debe existir diversidad y actitud constructiva. No hay que pensar tanto en cuánto se pierde, sino buscar lo positivo de cada cambio. En el fondo hay un ser humano bondadoso que se impone.

¿Tiene algo que ver la religión en esta forma de ver las cosas?

Sí, por supuesto. Hay una religión conservadora y que tiene la imagen de una mujer virgen. Si se investiga en los escritos nos encontraremos con una Magdalena de naturaleza judía y con unos apóstoles que pertenecían a la realeza de esa comunidad y que tuvieron descendencia. Hay que ver la religión católica con una fuerte carga histórica, que hace un viraje radical en el siglo IV, cuando el rey converso se dio cuenta que podía mover a los paganos hacia el cristianismo.

¿Cuál el papel de los nuevos padres frente a estas cuestiones?

Educar a los hijos con las mismas oportunidades y posibilidades, con una responsabilidad social capaces de buscar el bien común. En otras palabras se requiere mayor flexibilidad en la educación, enseñarles a que cada cual debe afrontar sus problemas.

¿El papel de los medios de comunicación?

Acá tenemos un gran problema. Los dueños y encargados de los medios tienen que analizar a dónde quieren ir. Por el momento me parece que los medios tienen una orientación comercial lo que obliga a replantear algunas cuestiones.

¿Esto cambia el matrimonio?

Es evidente que se puede transformar, en especial las formas de relacionarse. La cuestión es que cada quien vea cómo puede aportar con lo suyo para que esta unión funcione, para que cada uno de ellos se mueva en esta estructura. Hoy vivimos en la sociedad de la diversificación de estructura.