El joven actor inglés Daniel Radcliffe, nacido el 23 de julio de 1989, admitió que en cierta etapa de su vida luchó contra las bebidas alcohólicas y las fiestas, que gozaba con placer.
“Me volví adicto al alcohol para disfrutar de la vida. Hubo varios años en los que estaba totalmente enamorado de la idea de vivir una vida de famoso que, realmente, no es lo mío”, afirmó el protagonista de la saga Harry Potter, con lo que generó polémica en Inglaterra porque rompe la imagen de “niño bueno” que ha proyectado desde sus inicios en el cine, informó Emol.com.
El actor británico admitió a la revista masculina GQ que se “descarrió” cuando cumplió los 18 años y que abusó del consumo de alcohol y de las fiestas. No obstante, destaca que cuando se percató de que estaba convirtiéndose en un alcohólico, decidió cuidarse y dejar de beber.
Radcliffe afirma que muchas veces quedó literalmente botado en el suelo por su consumo de whisky, pero que afortunadamente nunca fue visto por los paparazzi. “Realmente me salí con la mía, porque hubo muchas instancias en las que una fotografía me hubiera delatado”, manifestó.
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