Recuerdo cuando conocí a Yashira Jordan hace 10 años. Una niña revoltosa, curiosa, algo caprichosa, pero inquieta y sobre todo apasionada.
Después de eso años caóticos en la Escuela de Cine en la Fábrica, nos volvimos a encontrar en Norte Estrecho. Yo como coguionista y director de casting, tuve el placer de coordinar con ella el casting en Argentina.
El trabajo que hizo, también como asistente de dirección, fue impresionante. Posteriormente realizo su opera prima; el documental ecológico, transmediático e íntimo: “Durazno”.
Durazno tiene las características de ser uno de los primeros documentales de ser producido casi en su totalidad, vía Crowdfunding.
Se trata de una novedosa forma de gestionar proyectos permitiendo, gracias a plataformas virtuales como Kickstarter e Indigogo, que personas de todo el mundo puedan contribuir económicamente a la película a cambio de premios creativos.
La campaña de “Durazno” en Internet fue un éxito, reuniendo a grandes artistas de Bolivia y Argentina, para legitimar la importancia de la historia de Ezequiel, quien buscó a su padre en una travesía de Argentina a Bolivia. El proyecto, por el tratamiento gráfico, teaser y demás avances es de un preciosismo y ternura únicos en su género. El documental dio que hablar mientras era preproducido y ahora que está en edición las sorpresas de este fruto mediático siguen sorprendiendo y antes de tiempo ya empiezan a ser saboreados por la Meca del cine. “Durazno” fue elegido junto a seis proyectos del resto del mundo para mostrar 10 minutos de su primer corte en el Festival Vision du Reel, uno de los festivales más importantes de Europa. Fue seleccionado junto a otros documentales de Canadá, Croacia e Italia.
Estos documentales en fase de postproducción fueron exhibidos del 16 al 26 de abril a representantes del festival, distribuidores y expertos de marketing en el mundo del cine. Todo un orgullo Boliviano, especialmente ahora que documentales como San Antonio, de Álvaro Olmos, La Chirola de Diego Mondacca y Con la Noche Hacia Adentro de Sergio Estrada están triunfando en festivales como el de Tribeca de Nueva York y el Bafici en Buenos Aires. Son tiempos trascendentales para el documental boliviano. Porque si la ficción muestra un divertimento de la verdad, el documental muestra la verdad sin anestesia, sin divertimento. Salud por los frutos de este curioso duraznero.
“Todavía en etapa de postproducción, fue elegido para difundir un corte de 10 minutos. ”
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