Esa es la nueva propuesta del director paceño Marcos Loayza, que abre la lista de las producciones bolivianas para este 2018, y que llega precisamente para seducir al público boliviano y convertirse en otro éxito de taquilla.
P.: Marcos, coméntanos sobre esta nueva producción cinematográfica.
R.: Se titula Averno, y se constituye en la pelicula más importante de mi carrera. Es mi séptima producción cinematográfica en la que me arriesgo a construir escenarios y personajes que sólo habitan en la imaginación.
La idea de rodar Averno surge entre 2005 y 2006, cuando realizaba otra de mis películas Estado de las cosas (2007). Para ese trabajo hice muchas entrevistas sobre Bolivia. Conversé con un especialista del pensamiento andino, quien tenía mucha información sobre el tema. A partir de ahí nació la necesidad de investigar el Mankapacha, que en la lógica aymara viene a ser el mundo de abajo, que no necesariamente es el infierno.
P.: Cómo defines a ese lugar en el que cobra vida tu nueva producción.
R.: El Averno no es necesariamente el infierno. Podría ser esa frontera en la que confluyen la vida y la muerte, ese lugar al que se accede por diversas puertas pero que a la vez no existe, o quizá sí, pero sólo en nuestro imaginario.
P.: Sobre los personajes.
R.: Para crear esos personajes hubo un arduo trabajo de diseño porque buscábamos que sean muy precisos dado que son personajes que sólo existen en la imaginación. Entre los principales puedo mencionar a Tupah (Paolo Vargas), tío Jacinto (Adolfo Paco), Joviero (Marcelo Bazán), la Ñata (Lia Michel), Cancio (Percy Jiménez), Humberto (Chubi González), al oficinista (Toto Torrez) y al presentador (Leonel Fran-chese, entre otros.
P.: Las locaciones de la cinta.
R.: Una parte fue filmada en la selva amazónica y el resto en la ciudad de La Paz, en locaciones nocturnas. El 70% del filme son sets armados y construídos para esta producción.
La noche es fundamental en la cinta, pues creo que La Paz es muy diferente durante el día a la ciudad que se manifiesta durante la noche. Son dos ciudades totalmente diferentes, en esa última es donde ocurren cosas y se abren puertas. A este mundo de abajo se ingresa por varias puertas. Una de ellas son las serpientes y los sapos, que son símbolos presentes en diversos aspectos de la cultura andina. Otra puerta por la que se puede acceder a este universo es a través del ritual y en éste siempre está presente el alcohol.
P.: ¿Cuál fue el proceso de producción y el presupuesto?
R.: El presupuesto del filme asciende a 340 mil dólares aproximadamente. El largometraje tuvo un proceso de producción de más de una década y en ella participaron más de 500 personas. La realización de este filme nos ha tomado mucho tiempo porque es muy compleja. De hecho es una película cuyo guión terminé de escribir en 2006. Son casi 11 años de trabajo que espero sea del agrado del público.
El equipo de producción estuvo conformado por Patricia García (Directora de Casting), Santiago Loayza Grisi (Producción), Nelson Wainstein (Dirección de Fotografía), Sergio Medina (Sonido Directo), Abel Bellido (Dirección de Arte), Valeria Wilde (Diseño de Vestuario) y Paola Romay (Maquillaje), entre muchos otros.
P.: Coméntanos sobre la distribución.
R.: La película se estrenará en Bolivia gracias a BF Distribution, un equipo de gente con amplia experiencia en distribución de cine independiente. Con varios años de trabajo en Bolivia, Averno es la tercera producción boliviana que se estrena de la mano de esta distribuidora.
Actualmente estamos aboca-dos al estreno en el mercado nacional, luego planificaremos la distribución a nivel internacional y la presencia en festivales internacionales.
Invitamos a toda la gente de Bolivia a visitar los cines donde se estrenará esta gran aventura nocturna llamada Averno.
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