LA HISTORIA
Andrew, Matt y Steve son adolescentes con los que uno se podría identificar, cada uno con una personalidad distinta que enfrenta retos significantes,derivados de estar cursando la preparatoria, donde se forman nuevas relaciones y se exploran nuevas facetas de sus siempre cambiantes vidas. Son imperfectos, desgarbados y un poco irresponsables.
Podrían ser como tú.
Al igual que la gran mayoría de nosotros, están obsesionados con narrar sus vidas, sin importar cuán mundanas sean -o, en su caso, sin importar cuán extraordinaria. Ahora, Andrew, Matt y Steve se han tropezado con algo que va más allá de su comprensión -o la de cualquiera. Su descubrimiento los lleva a adquirir poderosas habilidades de telequinesis; en lenguaje de novela gráfica, tienen súper poderes.
Ahora son capaces de, bueno, hacer cualquier cosa. Pueden mover objetos sólo con pensar en ellos, estrellar automóviles con la simple fuerza de voluntad. Aprender a volar...el deseo máximo realizado.
Después las cosas se tornan sombrías.
¿Qué harías si te sucediera a ti? ¿Qué serías capaz de hacer?
Esas son las enigmáticas preguntas que plantea Poder sin Límites, un nuevo filme que no se parece a ningún otro que hayas visto antes. Es una película de superhéroes que en realidad no es una película de superhéroes. En apariencia pertenece al relativamente nuevo subgénero del “material audiovisual encontrado” o a las películas de “punto de vista”, pero pone a sus convencionalismos de cabeza. Es emocionante, pero muy identificable; espléndida, con un trabajo de cámara y efectos visuales creativamente concebidos y ejecutados, pero anclados en la realidad.
Así que, ¿qué harías si repentinamente obtienes habilidades que van más allá de la comprensión? ¿Usarías un traje especial, volarías y le harías frente a los malhechores? Si fueras un adolescente, la respuesta esperada sería: por supuesto que no. Te la pasarías de maravilla con ellos, harías bromas complejas y quizás te vengarías de aquellos que te han hecho daño. Quizás y esos poderes intensificarían tus virtudes menos nobles. O peor.
“En la mayoría de las historias, los súper poderes son generalmente aplicados al bien y al mal, pero en la realidad serían aplicados a la necesidad”, comenta Josh Trank, quien hace su debut como director de cine y que también coescribió la historia con Max Landis. “Y cuando eres un adolescente, la necesidad es realmente acerca de que te hagan feliz. Te gustaría reírte y pasar un buen rato con esos poderes”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario