Hasta el domingo no conoceremos la decisión final y a la espera de escuchar la ansiada frase "The Oscar goes to...".
Manos a la obra. El ritmo de trabajo en Hollywood es incesante. Los operarios ya han comenzado a desplegar la alfombra roja. Dos mil metros cuadrados de glamour (150 metros de largo y 10 metros de ancho) por el que harán el paseíllo las grandes estrellas del firmamento hollywoodiense, ante la mirada de 700 afortunados, que podrán seguir en directo el desfile de sus artistas favoritos.
Además de elegir los diseños con los que desfilarán, las estrellas ya han comenzado sus tratamientos de belleza. Natura Bissé es, un año más, uno de los centros más reclamados y este año atenderá a las actrices en el spa del hotel en el que se rodó Pretty Woman, Beverly Wilshire.
Y La fiesta ya empezó. Las celebraciones en torno a estos prestigiosos premios empezaron el miércoles. Y es que se han cumplido 40 años de la entrega de Oscar honorífico al genio Charles Chaplin, y por eso han querido rendir un homenaje a la figura de este inolvidable actor.
Muchas estrellas quisieron asistir a la cita y entre ellos estuvo una española: Paz Vega, acompañada por su marido, Orson Salazar. Con un vestido vaporoso de color blanco, con el que marcó cinturita con un cinturón del mismo color, la actriz hizo su aparición en el Chateau Marmont de Los Ángeles. Paz Vega coincidió en esta fiesta con Kate Bosworth y su novio, el director Michael Polish, con James Cromwell, Rose McGowan, Cuba Gooding Jr, Olga Kurylenko y Jessica Chastain.
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