Video Estreno Una esperada 'Ivy Maraey'

Después de las buenas nuevas que fue la película Zona Sur para el cine nacional, Juan Carlos Valdivia vuelve y en grande con Ivy Maraey – Tierra sin mal, que con gran expectativa se estrena en el Fenavid 2013. Volcando la mirada hacia el sureste boliviano a partir de una premisa filosófica, el destacado cineasta nacional presenta un trabajo que lo muestra por vez primera en el rol protagónico en actuación. “Esta película está hecha para nosotros, a nuestra medida, de acuerdo al momento que estamos viviendo”, indica Valdivia que estará presente en la premier nacional de la misma, en La Casa de la Cultura, mañana, a horas 20:00 y que prepara una premier en el Chaco boliviano este sábado que viene.

La mirada del otro. Cuando Valdivia empezó a investigar y estructurar su idea principal de proyecto sobre lo que podría ser Ivy Maraey se dio cuenta que su conocimiento tenía que extenderse a través de la experiencia, por eso era necesario un acercamiento diferente al tema principal de su película. La búsqueda y el reconocimiento de lo que uno es a través del otro. “Es el viaje a la Bolivia profunda cuando yo me doy cuenta que no estoy capacitado para retratarla”, indica el director paceño que hace 6 años que comenzó sus conversaciones con antropólogos, historiadores pero lo más importante pobladores y ancianos de esta región del país. “Si de verdad Juan Carlos Valdivia tiene un compromiso con su comunidad, la boliviana, su desafío era trascender la obra creativa personal, y ser parte de la experiencia de guaraníes y ayoreos”, indica Carlos D. Mesa sobre este trabajo investigativo personal. Valdivia señaló, además, que esta es su manera como artista de poner el ojo en este mundo, una búsqueda personal de un lenguaje narrativo, “cada vez tienes que ser más mercenario en un mundo globalizado donde se tiene tan arraigada esta estética hollywoodense”, finaliza el director.

Dirección actoral. “El trabajo con Diego ha sido como una terapia para mí”, señala Valdivia. Una de las cosas más interesantes sobre este su último proyecto es la labor actoral con Diego Aramburo con quien a través de la técnica del performance lograron construir los personajes a partir de la creación propia. Recordemos que Valdivia también es el guionista de la película que, según él mismo comenta, fue alimentada gracias al conocimiento de Elio Ortiz el coprotagonista indígena del Chaco. “Siento que he dirigido esta película desde la tripa”, apunta el director que señala que a pesar de que también es una película muy cerebral, muy intelectual y filosófica para él ha sido un paso más para una madurez profesional.

Producción. Esta es la primera vez que Valdivia repite equipo ya que como comenta era importante contar con las personas de más confianza ya que él estaría dirigiendo desde delante de la pantalla. La producción y la estética parte del trabajo del artista Joaquín Sánchez. El director de fotografía es Paul de Lumen. El sonido de postproducción se realizó en Filmosonido (Chile) y estuvo a cargo del sonidista boliviano-colombiano Ramiro Fierro. La música es del maestro Cergio Prudencio. La postproducción de imagen se hizo enteramente en México, en Labo Digital donde se hizo todo el trabajo con las cintas de 35mm con las que fue filmada Ivy Maraey.

Propuesta. Zona Sur marcó claramente una reconciliación con la producción de cine nacional para la critica boliviana. Juan Carlos señala que hay una intención de marcar un referente también con Ivy Maraey. “Para mí hay un enorme riesgo en todos los sentidos y creo que es ahí donde el arte tiene que estar, hemos tratado de hacer una película profunda, contundente”, enfatiza. Así a través de una exploración de la interculturalidad en la Bolivia contemporánea Ivy Maraey irrumpe en el Fenavid 2013.

Aquí el trailer de la película: