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jueves, 1 de agosto de 2013

Hugh Jackman se vuelve inmortal

¿Nos puedes hablar de la premisa de la película y de lo que puede esperar la audiencia?

Esta película se desarrolla mucho después de X-Men Origens: Wolverine, muchos años hacia el futuro. Wolverine está en un viaje en una tierra extranjera, un nuevo mundo con personajes enteramente desconocidos y en donde gradualmente va saliendo de su ensimismamiento y es obligado a enfrentarse a quien es él en realidad. Tiene que conformarse con su verdadera naturaleza, ya no puede esconderse en una cueva. Ésta es definitivamente la más personal de todas las historias acerca de Wolverine. Uno lo va a encontrar en el punto más bajo de toda su existencia. Al principio de la historia, Wolverine está verdaderamente aislado, ha perdido a todas las personas de su vida y ahora está viviendo a solas, alejado del mundo. Está viviendo casi como un ermitaño, no tiene paz consigo mismo, con su naturaleza, con las garras, con ninguna cosa. Es como si todo en su vida le hubiera brindado nada más que miseria, dolor y destrucción, y ha llegado a un punto en el que está harto. Sin embargo, enseguida, y de manera renuente, es llevado hacia otro mundo en Japón, no puedo explicar exactamente qué sucede, tiene que ver con algo en su pasado.

¿Qué es lo que has descubierto de Wolverine a lo largo de los años? Imaginamos que ya se debe de haber familiarizado con tu vida.

Wolverine es un tipo atribulado y oscuro. No es necesariamente un tipo bueno, pero tiene un buen corazón. También es un hombre de lealtades. No tolera la injusticia y siempre tomará partido hacia lo correcto, pero es un héroe renuente si es que se le puede llamar así, él sólo sigue su propia voluntad, vive su propia vida. La gente a menudo me pregunta: “¿Siente que está haciendo lo mismo en cada película?”. Pues yo nunca he sentido eso. Este personaje tiene mucha profundidad. Es alguien extraordinario pero en muchos niveles es también increíblemente humano y yo encuentro que su travesía resulta fascinante. Sus momentos de depresión son lo más bajo en lo que cualquiera pudiera caer y el dolor que siente es algo con lo que todos nos podemos identificar. A lo largo de los años he encontrado que mi aprecio por Logan/Wolverine se ha ido profundizando.

¿Nos puedes hablar de la impactante acción y el trabajo de acrobacias que se despliegan en la película?

Hemos trabajado con un fantástico grupo llamado 87Eleven. He estado con ellos antes y son de lo mejor que hay en el negocio. Les vamos a mostrar acción que jamás han visto en sus vidas. Sé que es fácil decirlo, pero en verdad les digo que será asombroso. Este tipo de acción jamás vista es difícil de lograr. Todo el mundo se tiene que arriesgar un poco y eso es lo que estamos haciendo en esta película. La preparación para este filme ha sido incomparable. Wolverine es un tipo que se tiene que enfrentar con un nuevo estilo de lucha en Japón y no siempre gana. Así que debe obtener una lección de sus derrotas y errores. Tiene que aprender el estilo del samurái y las artes marciales japonesas para ir mejorando. Eso es lo que resulta emocionante y es todo un reto; significó que yo tuviera que aprender estas técnicas también. En esta ocasión, realmente mostraremos el estilo implacable de Wolverine. Esta cinta es muy distinta en su tono de los otros filmes de los X-MEN. Posee enormes secuencias de acción que la gente espera y va a ser muy divertida; tiene que ver con un tipo que está completamente fuera de su entorno.

Siempre pasas por un riguroso programa de entrenamiento para interpretar a Wolverine. ¿Cómo te preparaste físicamente para la cinta?

Personalmente entrené más duro y empecé más temprano. ¡Me golpearon todo el día durante el entrenamiento! Y aunque las armas y las garras de Wolverine son falsas, siempre estás a una nada de salir herido, así que uno no puede perder la coordinación. También tuve una dieta más aburrida y comí más de lo que he hecho jamás en mi vida. Físicamente quería que Wolverine luciera perfecto. Con esta película buscamos la excelencia en todas las maneras en que fuera posible.

¿Qué significó esta producción para ti en lo personal?

Al final de todo, cuando esté viejo y en mi silla de ruedas, y alguien me pregunte “¿qué película debo de ver del gran personaje Wolverine?”, le quiero decir: “ve Wolverine: Inmortal”. Estoy realmente emocionado con esta cinta. Tuvimos un asombroso guión de Chris McQuarrie y James Mangold es un director fantástico. Conformamos un gran grupo de actores y un equipo fantástico, puedo decir que los planetas se alinearon por todos lados.

¿Qué le añade la locación y temática japonesa a la nueva experiencia?

Tanto para los fans de la película como para la gente que no ha visto ninguno de los filmes, Japón es un trasfondo fascinante. Yo he estado en Japón unas diez u once veces y siempre he encontrado al país muy interesante. La gente es increíble y la cultura es rica y diversa, es algo completamente distinto de cualquier otro lado del mundo. Durante miles de años Japón quedó aislado de todos lados; es hasta relativamente poco tiempo que el país se ha convertido en parte de la comunidad mundial y aun así tiene una atmósfera muy distinta alrededor suyo.

¿Habiendo interpretado a Wolverine tantas veces, ¿aún le tienes entusiasmo al personaje?

Sí, me doy un pellizco todos los días que tengo oportunidad de interpretarlo. No existe trabajo que haya hecho en que hubiera pensado “me gustaría no estar haciendo esto”. Realmente hago lo que amo hacer en la vida. Imagina una persona a la que le encanta jugar al golf y alguien le toca el hombro y dice: “¿Le gustaría jugar de manera profesional por el resto de su vida?”. Siento que eso me pasó, de hecho eso fue lo que me sucedió, aunque relativamente tarde, a los 26 años de edad. Unos de los primeros papeles en el cine que conseguí fue el de este tipo, Wolverine, en X-MEN. No tenía idea de lo que se trataba y fue más un golpe de suerte el que me topara con uno de los más grandes personajes del género de las historietas. Lo encontré fascinante desde un principio y todavía tengo el empuje para llevarlo más a fondo.

¿Qué nos cuenta esta nueva aventura acerca de la mortalidad y la inmortalidad?

Uno de los temas de esta película es tener un propósito en la vida en vez de sólo vivirla. Creo que todos podemos caer en un estilo mecánico de vivir dentro de una rutina diaria. Algunas veces puedes conducir del trabajo de regreso a casa y pensar “de hecho ni siquiera recuerdo el haber manejado a casa”. Quiero decir que uno puede vivir día a día sin ver por qué está aquí, lo que está haciendo y quién es en realidad. Deberíamos preguntarnos en qué estamos contribuyendo al mundo. Esta película realmente explora esta pregunta y ese tema. Encontramos a Wolverine sin un propósito en la vida. Él no está seguro de qué hace aquí o si quiere seguir en esta vida. Siente que ha vivido mucho tiempo y ahora experimenta lamentos y dolor, encuentra difícil seguir adelante. Hallar una razón para vivir, descubrir quiénes somos en realidad es algo elemental para todos y en esta película tuvimos la oportunidad de explorar ese tema. Fue muy emocionante.

¿Te identificas con Wolverine de alguna manera?

Lo hago. Desde mi punto de vista creo que lo que representa Wolverine es, de cierta manera, todas las cualidades que me gustaría fueran mías: verdadera fuerza, lealtad y la habilidad de enfrentarme a mis rivales. Pero también tiene sus fallas. Lucha con las relaciones humanas. Tengo un hijo de 12 años y él me dice: “Papá, Wolverine es un tipo muy rudo”. Niños de 12 o 13 años opinan: “Quiero crecer y ser como Wolverine”. Si hay alguien a quien quieres en tu equipo, ése es Wolverine, y si hay alguien a quien no quieres molestar es a Wolverine (ríe). Uno sabe que hay algo bastante asombroso en esa combinación. Creo que en las tiras cómicas él no tenía tanto poder; pero era de los más temidos y atemorizantes gracias a su corazón, aunque suene contradictorio. El gran valor es que Wolverine nunca se rendiría, él nunca dirá que se rinde.

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