Este 22 de julio, el productor Jac Ávila presentará su más reciente trabajo cinematográfico denominado Sirwiñakuy, una historia escrita y dirigida por Amy Hesketh, en 2007, y que fue rodada entre octubre y noviembre de 2008 en la ciudad de La Paz.
La película será estrenada simultáneamente en La Paz, Santa Cruz y Cochabamba. Al margen de Ávila, lo acompañan en la producción Roberto López, miembro del equipo de Pachamama Films y la propia Hesketh. Participan en el filme Verónica Paintoux, Jac Ávila, Erik Antoine, Beto López y Alfredo López.
“Amy tenía una historia en mente y por mucho tiempo. Originalmente la historia tomaba lugar en Francia, pero después de vivir una larga temporada en La Paz, decidió que su historia tome lugar en ésta ciudad”, señala Ávila, quien añade que la historia es simple, puesto que trata sobre una relación de pareja, entre un boliviano y una mujer extranjera, quienes comienzan una relación intensa desde el momento que se ven por primera vez en un café.
Según Ávila, conoció a Amy Hesketh, la guionista y directora del filme en La Paz, en septiembre de 2005, cuando ella respondió al casting de un “docudrama” que él estaba produciendo para la National Geographic. Amy fue seleccionada y se integró al elenco. Más tarde, en noviembre de ese año, Jac presentó una película en el Festival Diablo de Oro en Oruro.
En esa película actúan Jac y Verónica Paintoux, entre otros actores, en su mayoría franceses. Hesketh vio la película y quedó con la historia y química entre Jac y Verónica. De esta forma, Amy se quedó en La Paz. Escribió el guión de Sirwiñakuy, teniendo en mente como protagonistas de la trama a Jac y Verónica.
Sirwiñakuy se rodó en cinco semanas, en diez locaciones incluyendo la Feria de la 16 de Julio en la ciudad de El Alto. “La historia en sí está concentrada en la relación de Luis (Jac Avila) y Anouk (Verónica Paintoux), con un mínimo de diálogos, una relación más bien física, mental, emocional y sadomasoquista”.
Los personajes de la trama
Luis, el paceño, es evidentemente un intelectual, de una familia que en su momento tenía cierta influencia.
Para Luis ese pasado queda solamente en las memorias que se reflejan en las paredes de su casa.
Anouk conoció Bolivia de niña porque su familia trabajaba en La Paz, se fue al terminar la secundaria. Regresó más tarde.
Geoff, hijo de norteamericanos, vivió toda su juventud en Bolivia, estudió, se casó, se divorció y decidió quedarse.
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